Impresionante exposición tecnológica. Fantástica idea futurista. Una fascinante integración entre la realidad y un mundo virtual paralelo. Todas estas son frases que pueden describir a ciencia cierta el impacto que ha causado la nueva ventana digital de Samsung.
Esta increíble creación funciona básicamente como un enorme Ipad con tecnología táctil, cumpliendo además la función clásica de un cristal transparente que permite a la vez visualizar lo que está ocurriendo fuera del hogar.
Entre otras de las grandes virtudes de esta genialidad tecnológica vale la pena destacar el cuidado de la privacidad, ya que la ventana digital de Samsung no es visible desde el exterior, evitando que vecinos o casuales transeúntes puedan enterarse de lo que ocurra en el interior de la vivienda.
La instalación del sistema es muy sencilla y puede ejecutarse en cualquier habitación, siendo muy útil en espacios destinados al estudio, la lectura y el entretenimiento. Para hacer aún más atractivo el diseño, la ventana digital de Samsung puede ser programada mediante una aplicación para simular una persiana e impedir así la visualización constante de los que se está ejecutando realmente en pantalla.
Con el fin de plasmar una idea aún más sustentable y evitando grandes consumos, la ventana digital de Samsung proyecta sus intenciones de protección del medio ambiente y se retroalimente de la propia luz exterior.
Indudablemente estamos en presencia de éste y otros dispositivos sólo imaginables como potenciales innovaciones hace algunos años atrás; siendo hoy verdaderas realidades que forman parte de vida cotidiana.
Obviamente, el precio será un condicionante para los interesados y, aunque la compañía aún no ha dado a conocer cifras, todo hace pensar que no será un producto demasiado accesible. Tal vez la actual existencia de gran cantidad de productos de bolsillo que pueden ejecutar las mismas aplicaciones sea un factor que afecte contrariamente a los intereses de la empresa por introducir la ventana digital de Samsung al mercado.