Claramente la decoración se encuentra estrechamente vinculada a la moda, manifestada esta afirmación a través de innumerables ambientaciones. Algunos estilos como el escocés son un claro ejemplo de esta realidad, fundamentalmente al utilizar sus clásicas telas tartán.
Considerado un tipo de tejido anticuado, las telas tartán se están incorporando paulatinamente a las decoraciones más modernas, sobre todo siendo utilizadas como fundas de cojines, almohadas y tapizado de los muebles.
Si bien es cierto que nunca han desaparecido de la escena internacional, el secreto de la incorporación de las telas tartán de origen escocés en decoraciones actuales es la innovación en relación a los colores.
El verde oscuro, bordó y otros tradicionales colores siguen siendo los más característicos, pero son aquellos con tonalidades más claras y llamativas los que están siendo considerados por los principales decoradores alrededor del planeta.
En el específico caso de la decoración de interiores, es posible detectar en diversos espacios la utilización de la tela tartán en sofás, pantallas de lámparas, alfombras y otra gran cantidad de complementos destinados a embellecer una habitación.
Las bondades estéticas propuestas por la telas tartán le permiten ser fácilmente adaptables a diversos materiales de base como maderas, metales y cristales. Al presentar su tradicional estampado cuadriculado, compuesto por más de un color, su adecuación al combinarlo es más sencilla.
La apertura hacia nuevos colores generó una explosión veloz de las telas tartán en el mundo de la decoración. Destacadas compañías fabricantes de muebles, mantas y otros objetos han ido incorporando paulatinamente el estilo escocés a sus diseños.
Obviamente es posible incorporar en menor escala las telas tartán en el hogar. Es importante, con el fin de no saturar rápidamente los ambientes, agregar paulatinamente este tipo de estilos.
Para una efectiva decoración, los colores de las paredes deben ser generalmente más claros que el de las telas tartán, sirviendo los mismos fundamentalmente como fondo principal de la escena.