El estilo cottage está íntegramente ligado a las clásicas cabañas inglesas. Es una armoniosa combinación entre los detalles finamente seleccionados y el estilo rústico de algunos sectores rurales.
En definitiva, el objetivo es lograr un ambiente cálido y acogedor con pinceladas de la época victoriana y marcadas influencias de un innegable pasado con aspectos clásicos.