Las alfombras de lana son complementos ideales debido a sus beneficiosas características; fundamentalmente son colocadas en ambientes donde las bajas temperaturas son habituales, aunque se ha comprobado que son además grandes conductores del frío proyectado por acondicionadores de aire.
De fácil mantenimiento y en una importante variedad de diseños y tamaños, este tipo de elementos son sumamente resistentes, garantizando una prolongada vida útil. La suavidad transmitida al tacto hacen de su uso una experiencia realmente placentera.