En otras oportunidades se ha hecho referencia a un gran problema existente en un alto porcentaje de hogares: el almacenamiento. Zapatos por un lado, ropa que es pocas veces utilizada por otro y como consecuencia un caos generalizado que parece ser irreversible.
Afortunadamente, para contrarrestar esa traumática tendencia, existen tres simples principios que contribuirán a la creación de ambientes espaciosos, confortables y, sobre todo, ordenados.