Aunque parezca imposible darles otra función fuera de la habitual, el hecho de reutilizar puertas se ha convertido en uno de los proyectos de bricolaje más recurrentes que existen, generando con estas piezas diferentes elementos de utilidad variada. Estantes, pizarras y otra gran cantidad de objetos pueden ser desarrollados, algunos de manera sencilla y otros con cierto grado de complejidad para aprovecharlos al extremo.
En el presente post de Decoracionia compartimos algunas ideas tomadas de distintos sitios web donde la creatividad de las personas en esta actividad fueron expuestas. Seguramente, en tu hogar también podrás llevar adelante algunos de estos proyectos antes de deshacerte definitivamente de una vieja puerta en desuso.
Si bien el primero de los proyectos puede realizarse solamente al reutilizar puertas con bisagra central, las que igualmente pueden encontrarse en casas de antigüedades, es imposible dejar de compartirlo por el hermoso resultado final. Se trata de pintar la puerta y agregar algunos estantes en forma de semicírculo, obteniendo así un hermoso esquinero para exponer adornos.
Otra interesante idea para reutilizar puertas es convertir a las mismas en piezas de almacenamiento o librero estilo vintage. Para este tipo de bricolaje se recomiendan las puertas con distintos recuadros porque son más fáciles de cortar y es además ese sobrante el que servirá para darle profundidad al mueble.
Reutilizar puertas para transformarlas en pizarras o un decorativo expositor de recordatorios es una magnífica idea y de sencilla realización. Simplemente vasta con pintar la pieza con pintura para pizarras y colgarla de la pared en la cual queremos que se luzca. Esta idea es ideal para despertar la creatividad artística de los niños incluyendo algunas tizas para colorear.
Existe otra gran cantidad de fabulosas ideas para reutilizar puertas, las que seguramente compartiremos en posteriores post de Decoracionia. Seguramente, alguno de estos proyectos te vendrá como anillo al dedo para darle un aspecto diferente a ese sector de la casa que estéticamente no te resulte demasiado convincente.