Las paredes son la base de cualquier decoración. Muchas veces su tratamiento es menospreciado y el resultado final no es el más óptimo, ya que su importancia es superlativa para enmarcar un estilo decorativo.
Los colores, texturas y diseños elegidos para las paredes tienen directa influencia en los estados de ánimo, dependiendo de estas características es posible crear ambientes relajados o cargados de energía.
No es lo mismo establecer las condiciones estéticas de una pared en el dormitorio, donde la intención es impregnar el espacio de relajación que una cocina, donde la funcionalidad es el principal aspecto.
Dejando de lado las clásicas pinturas, las maderas y los mosaicos, la empresa italiana Studioart fue más allá de lo convencional y ha lanzado al mercado lo que dio a conocer como paredes de cuero.
Con acabados realmente maravillosos, el sistema se basa en la instalación de piezas trabajadas en cuero con diferentes motivos exclusivos para cualquier ambientación.
Dependiendo del estilo decorativo elegido o, en el caso inverso, tomando estos apliques para pared elaborados en cuero como punto de partida, es muy sencillo armonizar las paredes con el resto de los elementos existentes.
Dentro de la amplia colección pueden encontrarse pequeños cuadros, en colores neutros, ideales para salas principales o dormitorios por su calidez, brillantes unidades para la cocina y motivos específicos para los moradores más arriesgados.
Muchos diseños son totalmente compatibles con estilos antiguos con un reciente resurgimiento. Ideales para oficinas son piezas que además, por las características propias del cuero, resultan aislantes de sonidos.
Las texturas, si bien varían levemente de acuerdo a cada modelo, generan sensación de suavidad y la blanda superficie creada por las unidades de cuero invita a apoyarse en la misma, casi como un acto incontrolable.
Distinción, acústica, variedad y adaptabilidad, características realmente destacables para un producto que busca paulatinamente posicionarse de manera definitiva en el mercado.