Alfombras, tapices, cojines y otros elementos similares son los complementos ideales para darle color, textura y calidez a las habitaciones. En el específico caso de las mantas personalizadas, las mismas son una nueva manera de agregarle originalidad a los estampados, evitando totalmente ser similares a otros.
Con una inagotable diversidad de materiales, diseños y colores cumplen la función, en muchos casos, de romper con la monotonía de una decoración.
Al aplicar un modelo o estampado seleccionado previamente la manta se convertirá en un elemento realmente muy especial, perfecto para ser utilizado en el hogar u otorgarlo como llamativo y vistoso obsequio a alguna persona querida.
Algunas ideas se centran en el bordado de las iniciales o el nombre completo del futuro propietario. Es importante contratar a personas capacitadas para dicha tarea, ya que si se carece de experiencia puede resultar una tarea compleja que culmine con resultados estéticamente negativos.
Para un proyecto más sencillo pero un poco más costoso, puede optarse por imprimir en la tela una fotografía alusiva a la relación de amistad, sentimental o lo que corresponda que sirva como estampado.
Las mantas personalizadas son siempre utilizables, por lo que al pasar momentos en la sala principal, frente al televisor o en el propio dormitorio servirán para paliar el frío y recordar a la vez el vínculo existente entre la persona que realiza el obsequio y el destinatario del mismo.
Una excelente idea es utilizar las mantas personalizadas como regalos empresariales, aplicando el logotipo bordado o impreso de la compañía en la propia manta. En el caso de ser confeccionadas para uso propio, exponerlas en los ambientes más transitados del hogar otorgará un efecto distinto.
Fotografías familiares, imágenes de las mascotas e incluso escudos deportivos para los fanáticos son increíbles opciones para poseer un producto original de bajo coste, invirtiendo solo en el bordado o la impresión sobre tela correspondiente.