Las duchas con hidromasaje son cada vez más habituales en las casas. Su función es proporcionar un baño más relajado gracias a un sistema de chorros múltiples que, lejos de lo que pueda parecer, a menudo requiere una instalación sencilla. La mayoría de los modelos que se comercializan están preparados para aprovechar la alimentación de agua de la vivienda, sin necesidad de obras. De esta manera, basta con desmontar los grifos antiguos y conectar la columna a la alimentación de agua fría y caliente.
Antes asociábamos baño relajante, o incluso hidromasaje, con un baño, y a ser posible, con mucha espuma. Pero ya no es necesario. Ni el tiempo que dedicábamos a su preparación, ni el espacio que la bañera ocupa, ni el gasto de agua que supone. Ahora podemos convertir nuestra ducha diaria en el momento relax del día. Las duchas con hidromasaje han evolucionado mucho, dando lugar a verdaderos centros de relajación con diseños espectaculares, que no sólo se integran a la perfección en los cuartos de baño más sofisticados y modernos, si no que los realzan.
Tener duchas con hidromasaje en nuestra casa tiene muchos beneficios. Una de las principales ventajas de tener cabinas de hidromasaje, es que permiten cuidar la espalda, una de las zonas corporales del cuerpo que más suelen sufrir. Reducen el estrés que diariamente se acumula por el trabajo y otras responsabilidades. Con lo que también influye en vuestro estado anímico y el sueño. Previene otro tipo de enfermedades, ya que como sabréis, al trabajar sobre los músculos influye en la circulación corporal, reactivándola.
Lo primero antes de eligir las duchas con hidromasaje que evaluar el espacio que se tiene disponible en el baño donde se va a instalar el sistema de ducha. Existen diferentes modelos de columnas para la colocación en cualquier cuarto de baño, pero hay que tener en cuenta ciertos aspectos para poder tomar una buena decisión.
En cuanto a la estética, en el mercado dispones de duchas con hidromasaje en madera, aluminio, blancas, en piedra e incluso se puede seleccionar incorporar otros compartimientos de accesorios, como estantes y espejos. Muchas opciones para decidir lo que quieres para tu panel personalizado.
La presión recomendada para el óptimo funcionamiento de las duchas con hidromasaje debe estar entre 1 y 6 atmósferas de presión. En caso de que la presión sea inferior o exceda los parámetros indicados, se recomienda poner una bomba de presión o un limitador según cada caso.
Lo mejor es que la instalación la realicen profesionales con experiencia en este tipo de duchas. Es posible que cuando vayas a comprarla te ofrezcan la posibilidad de contratar la instalación. Posiblemente es la mejor opción por las dificultades que supone su colocación.
Para realizar la limpieza general de las duchas con hidromasaje es recomendable utilizar jabones neutros. Otro tipo de productos pueden ser abrasivos y dañar la instalación. Al menos una vez por semana, hay que eliminar las impurezas que se acumulan y tratar la superficie con un trapo suave empadado en detergente líquido. Para asear la mampara es conveniente no emplear productos que contengan alcohol o detergentes y también hay que cuidar que los jets (chorros) no se obstruyan con restos de jabón.