Como su nombre lo indica, los dormitorios doble propósito cumplen su función inicial donde la cama y el descanso son la prioridad y, por otra parte, el espacio disponible permite realizar otro tipo de actividades dentro de la habitación. Es así que puede compartirse el aposento con un escritorio o espacio de lectura, entre otras disponibilidades.
Una de las principales consideraciones para este tipo de ambientes es lograr combinar armoniosamente las dos funciones que se desarrollarán en ese lugar. A continuación, te mostramos algunas sugerencias y consejos destinados a mejorar tanto el orden como la funcionalidad de estas particulares habitaciones.
Lo más importante al combinar la decoración de dormitorios doble propósito es darle prioridad a las preferencias particulares. Sumado a ésto, la practicidad debe ser el mayor potencial de un dormitorio con estas características. Este último punto se refiere a no entorpecer con sobre carga de muebles o accesorios la libre circulación dentro de la pieza.
Aunque intentemos evitarlo, los dormitorios doble propósito proponen inconscientemente dos decoraciones dentro de una misma. Lo ideal para no forzar la uniformidad de modo desmedido es evitar que ambas funciones sean o demasiado simples o demasiado exageradas en su concepción estética. Ese es el equilibrio perfecto que hay que intentar lograr para una ambientación ideal.
Para otorgar aún mayores certezas acerca de lo que se debe hacer decorativamente en este tipo de dormitorios doble propósito, es conveniente decir que la unificación de ambos sectores funcionales debe darse, preferentemente, a través de los detalles. Unir los espacios con plantas u objetos que encajan para ambos es el ideal en estas ambientaciones en particular.
Es importante además en los dormitorios doble propósito evitar la neutralidad, ya que se de esa manera se logrará el objetivo de la uniformidad, pero se pecará de austeros en cuanto a la incorporación de colores y detalles que ayuden a embellecer el espacio.