La cama, nuestra aliada cada noche. Ésa que nos invita a soñar cuando nos metemos en ella y descansamos después de todo el día. Algunos, los más afortunados, recurren a ella más de una vez al día para echarse pequeñas siestas y recargar energías.
Otros, se conforman con unas cuantas horas cuando el trabajo y las responsabilidades diarias se lo permiten. Pero todos necesitamos una cama cómoda para obtener un buen descanso. Hay muchos tipos de camas, de colchones, de cabeceros… Y en esta ocasión queremos hablarte de unas camas que no saben estarse quietas en el mismo sitio durante mucho tiempo, ¡porque tienen ruedas!
Este tipo de camas tienen múltiples opciones. Puedes colocarlas donde quieras con la facilidad que le aportan las ruedas. Por ejemplo, si quieres darle un aire nuevo al dormitorio y cambiar la posición de la cama, podrás hacerlo sin necesidad de esfuerzo, tan sólo tendrás que empujarla hasta el lugar que hayas decidido colocarla.
Además, en verano o primavera, si cuentas con una terraza o jardín, puedes sacarla fuera a tomar los rayos de sol, o aún mejor, a dormirte viendo las estrellas, sin tener que soportar el calor de la casa o utilizar el aire acondicionado. Además, es ideal para habitaciones infantiles, ya que su movilidad dan un aspecto juvenil, de vida y diversión. No sólo eso, sino que te permitirá intercambiarla entre la habitación de tus hijos, si para uno se queda pequeña, pero para el más pequeño es perfecta.
Por último, puedes combinarla con muebles que también tengan ruedas, de esta forma, tendrás un dormitorio totalmente móvil y podrás redecorarlo cuando quieras, sin necesidad de invertir dinero, tan sólo cambiando de lugar el mobiliario. Aunque creas que no, éste simple gesto, dará un aire completamente diferente a la estancia.
